Nos inspiran las sensaciones a través de los sentidos, los conceptos se traducen, los conceptos se ilustran, se convierten en filosofía.

La necesidad de la vibración y el placer nos hace buscar experiencias estéticas a través de las formas.

Formas que en todas sus representaciones advertimos en primer lugar por encima de todo.

Sin pretensión de convertir la creación en una bandera de ilusiones ajenas, nace la marca IMPÚRIBUS.

Surge rechazando el infantilismo del mundo de la creación y en concreto de la moda, ese intento del significado por encima de la estética, la valoración de las explicaciones vacuas, sin contenido; el vacio.

¿Por qué hago lo que hago?

¿Por qué me atraen las formas geométricas?

¿Por qué busco los colores puros?

A través de este viaje por el mundo del cerebro, se justifican mis influencias personales, áreas cerebrales que han absorbido durante toda mi vida absolutamente todos los estímulos personales, estéticos culturales, educativos y morales, además de las facultades biológicas con las que he nacido. De este modo entendemos que inspira nuestra creación, que alimenta nuestra fábrica.

Las metáforas traducen conceptos y estos a su vez se materializan en imágenes, espacios, formas, colores y texturas.

Aquí comienza un sueño …